Como muchos sabéis (sino podéis consultar mi BIO), estudié la Diplomatura de Turismo y me encanta viajar. Cada viaje es una nueva oportunidad para mí de descubrir sitios en los que no he estado, de hacer fotos para compartir en mi cuenta de Instagram e inspirar a otros viajeros. Pero sobre todo, con lo que más disfruto es con la maravillosa fase previa de organización. Reconozco que la parte de buscar, comparar y aprender cosas del destino al que voy a ir es muy entretenida y de mis favoritas.

Así que en este artículo os voy a contar cómo me decido por un lugar u otro y qué cosas hay que tener en cuenta antes y durante el viaje. Las herramientas que utilizo para reservar transportes, alojamientos y entradas a los sitios de interés, cómo ahorrar y muchas cosas más. A continuación un listado con las 10 cosas que tengo en cuenta para organizar el viaje de mis sueños.

   1. Elección del destino

Esta es la parte más complicada para mí, ya que tengo una lista interminable de lugares a los que quiero ir antes de morir. Pero hay cosas que me ayudan a decantarme por un destino u otro para ir confeccionando el viaje perfecto. Para ello, tengo en cuenta tres variables:

  • El número de días que tengo disponibles.

  • El compañero elegido para una nueva aventura.

  • El presupuesto máximo para gastar.

No es lo mismo hacer una escapada de fin de semana o de 4-5 días, que un viaje grande a la otra punta del mundo, donde mínimo vamos a necesitar de 10 a 15 días para disfrutarlo. Tampoco es lo mismo ir con amigas o ir en pareja. Y sobre todo, ser conscientes del dinero que tenemos disponible para destinar al viaje, sin que ello nos suponga algún contratiempo en nuestra vida diaria.

Lo recomendable y que yo suelo hacer para viajar barato y sin aglomeraciones es elegir los meses del año más económicos, en temporada baja (teniendo en cuenta el destino). Normalmente son: abril, mayo y junio, septiembre, octubre y noviembre. Pero si no nos queda más remedio que viajar en temporada alta, hay que reservar los vuelos y alojamientos con toda la antelación posible. De esta manera nos saldrá más barato y tendremos mayor oferta donde elegir.

Y por último, muchas veces me voy a la página web de Skyscanner (luego os hablaré de las herramientas que utilizo para hacer las reservas) y me dejo llevar. Pongo el origen, las fechas aproximadas y el destino en blanco para que me sugiera ofertas. Examino las propuestas para intentar no repetir y elijo las que más me hayan gustado. Después, comparo los precios de los alojamientos y los lugares de interés para decidirme por uno u otro. No os imagináis la de sitios bonitos que he descubierto haciendo esto, a los que de normal nunca me hubiera planteado ir. ¡Tenéis que probarlo!

   2. Reserva de transporte y alojamiento

Lo dicho, podemos tener claro el destino o dejarnos llevar, pero una vez lo tengamos decidido, lo más importante para encontrar chollos es hacer las reservas de transporte y alojamiento a la mayor brevedad.

Por ejemplo, si queremos hacer un viaje grande en los meses de verano, lo ideal es saber cuánto antes cuándo vamos a tener las vacaciones para reservar el vuelo. En enero suele haber ofertas muy buenas (son las rebajas de los viajes) y hay que aprovechar. Pero si no podemos saberlo con tanta antelación, como mínimo recomiendo reservar tanto el transporte como el alojamiento dos meses antes. Así no sale tan caro y hay más opción donde elegir.

Hay una gran cantidad de herramientas para encontrar el vuelo, tren, casa o apartamento que más se ajuste a nuestras necesidades y a nuestro bolsillo. Como os he comentado antes, yo suelo usar Skyscanner para los vuelos porque te da la opción de hacer búsqueda por mes y elegir así los billetes de ida y vuelta en las fechas más económicas. Para los alojamientos utilizo Booking, por su rapidez para reservar y los filtros. Y por último, RentalCars para el alquiler de coche porque aporta información clara sobre la política de combustible o el tipo de cobertura.

Aunque siempre comparo precios con otros buscadores, incluso directamente en las compañías. Atrápalo, Rumbo, eDreams, Kayak, Autoeurope, Ryanair, Trivago, Airbnb o Logitravel son las otras páginas web que más suelo frecuentar. Un truco, si buscas un vuelo pero no lo vas a comprar al momento, abre en tu navegador una nueva ventana de incógnito. Por increíble que parezca, algunas compañías varían los precios de los asientos obteniendo información del navegador y la procedencia del futuro cliente.

   3. Documentación

Ya tenemos el destino, el transporte y el alojamiento, así que el siguiente paso para viajar es tener toda la documentación en regla. Para viajar por Europa (como ciudadano europeo) es suficiente con mostrar el DNI, Documento Nacional de Identidad en vigor. Pero para viajes al extranjero fuera de la Unión Europea, nos hará falta el pasaporte y dependiendo del país, hasta un visado.

Antes de cada viaje, yo siempre consulto la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. Hay fichas por países y recomendaciones de viaje para cada lugar, así que elegiremos el destino en cuestión y nos informaremos sobre las cosas más importantes como la documentación, la seguridad, la sanidad o la moneda, entre otras muchas más.

Por ejemplo, el año pasado viajé a Estados Unidos por un periodo de 15 días y para poder acceder y desplazarme libremente por el país me hicieron falta los siguientes documentos:

  • Pasaporte con una vigencia de al menos 6 meses.
  • ESTA (Electronic System for Travel Autorization). El programa de exención de Visa autoriza a los españoles y a los ciudadanos de otros 37 países a entrar en Estados Unidos, con una estancia máxima de 90 días sin necesidad de visado. Hay que solicitar esta autorización por Internet con un mínimo de 72 horas y su coste es de 14 dólares.
  • Permiso internacional de conducir. En el caso de España, se puede solicitar en la Dirección General de Tráfico por Internet o presencialmente. Cuesta 10,30 euros, tiene validez de un año y es reconocido por Estados Unidos, aunque también tienes que llevar el del país de origen.

 

 4. Teléfono con conexión a Internet

Otra cosa que tengo muy en cuenta cuando viajo fuera es la conexión a Internet en el móvil. Para comunicarme con mi familia y amigos en cualquier momento (sin tener que esperar a llegar al hotel para tener Wi-Fi), para utilizar Google Maps o subir contenido a mis Redes Sociales. (Por cierto, podéis seguirme en Facebook, Twitter e Instagram para estar al día de todo lo que voy publicando).

No todas las compañías tienen el roaming fuera de la Unión Europea incluido en su tarifa móvil, como es mi caso. Cuando viajé el año pasado a Estados Unidos sin datos lo pasé mal, sobre todo en los momentos en que no tenía claro cómo llegar o encontrar un sitio. Así que, ¡una y no más!

Fue entonces cuando gracias a Viviendo de Viaje (una pareja muy maja de mi amada terreta, Valencia) descubrí Holafly. Es una startup española que ofrece tarjetas SIM con datos ilimitados para tener Internet en el extranjero. Tiene bastantes destinos donde elegir, puedes seleccionar los días que vas a estar en el destino, te la envían a casa gratis y lo mejor de todo, mantienes tu número de Whatsapp. Para que os hagáis una idea, una tarjeta SIM de Holafly con datos y llamadas locales ilimitadas en Estados Unidos durante 10 días ronda los 39 euros.

Por supuesto, también podéis optar por el Wi-Fi gratuito de cafeterías, restaurantes y el del hotel donde os alojéis, que era lo que hacía yo al principio. Pero entonces es recomendable que vayáis preparados con una aplicación que te permita acceder a mapas offline, como Google Maps o Maps.ME. Aunque si buscáis comodidad y os entra dentro del presupuesto, os recomiendo que probéis Holafly.

   5. Ruta y lugares de interés

Y llegamos a mi parte favorita, organizar el planning del viaje donde decido qué ver y cuánto tiempo dedicar a cada atracción. Es el momento de investigar como una loca y para ello leo muchos blogs de viajes y páginas web oficiales del destino, busco hastags en Instagram para ver imágenes y hasta cae alguna guía. Normalmente de Lonely Planet o mi último descubrimiento, las guías Trotamundos Routard. También pregunto a amigos y conocidos que ya hayan estado, y por supuesto, pido recomendaciones en Redes Sociales (siempre hay gente dispuesta a ayudar o a contar su experiencia).

A partir de ahí hago un listado con todas las cosas que me gustaría ver (a veces es inviable hacerlo todo) y me voy a Google Maps para ir localizando los sitios. Los agrupo por zonas y proximidad entre sí para aprovechar el tiempo al máximo y finalmente lo distribuyo en los diferentes días que tengo disponibles. Lo más importante, hacer la reserva de las atracciones turísticas porque la entrada suele ser más barata al comprarla online y también para evitar colas.

Y por último, para conocer la esencia del lugar que visito suelo reservar un tour guiado para el primer día del viaje. De esta manera, aprendo la historia, datos y curiosidades de la mano de una persona local. Casi siempre contrato estas visitas guiadas o excursiones con Civitatis porque la experiencia que he tenido con ellos, tanto dentro como fuera de España siempre ha sido muy positiva. La última reserva que hice con Civitatis fue en septiembre de 2019 durante mi viaje a Grecia, un paseo en barco por la Caldera de Santorini. En mi opinión, una excursión muy interesante para conocer el origen volcánico de esta preciosa isla.

   6. Dónde comer

Al principio era algo que dejaba a la improvisación, comía donde me pillaba sobre la marcha. Pero según fui viajando me di cuenta de que el tiempo es oro y lo que pierdes por indecisión o por desconocimiento podrías haberlo dedicado a ver otras cosas. Por no hablar del mal recuerdo que nos puede quedar de un viaje al tener una mala experiencia en un restaurante.

Así que miro la zona por donde voy a estar a la hora de la comida o de la cena para cuadrar en qué lugar comer. Siempre suelo escoger dos o tres locales que me gustan, por si acaso en alguno de ellos es necesario hacer reserva previa (aunque esto también lo tengo en cuenta) o por si está lleno.

Para ello, utilizo mucho TripAdvisor y ElTenedor. Ahí consulto las opiniones de otras personas que han estado en esos locales, veo fotos, comparo precios e incluso si lo tengo muy claro, reservo. Aunque lo normal es que elija un par o como mucho tres que estén cerca entre sí para echar un ojo desde fuera y poder decidir mejor. Cosas como la cantidad de gente que hay en el local, la presentación de la carta, que ponga los precios fuera o cómo te reciban, son cosas que valoro mucho.

   7. Cosas a tener en cuenta

Creo que antes de viajar es muy necesario tener algunas cosas claras para que no nos pille de sorpresa. Mi filosofía es: cuanta más planificación, menos contratiempos tendremos y más podremos disfrutar del viaje. Las cosas que tengo en cuenta antes de viajar a un país son:

  • La toma de corriente y voltaje.
  • El cambio de moneda.
  • La zona horaria y la temperatura.
  • La cultura y costumbres.
  • La sanidad.

De estas cinco cosas, tres de ellas son muy importantes a la hora de hacer la maleta. Casi siempre suelo llevar un secador pequeño y una plancha del pelo, por lo que necesito saber qué tipo de enchufe y voltaje usan en el destino, por si tengo que comprar un adaptador o un conversor. Ésta es la mejor página que he encontrado para consultarlo.

También es necesario saber la zona horaria y la temperatura (en el origen puede ser verano y en el destino invierno), la cultura y las costumbres del país para llevar la ropa apropiada por una cuestión de cortesía o de respeto a sus normas y valores. En algunos países musulmanes más conservadores tienen un código de vestimenta para entrar a las mezquitas que incluye a los turistas. Es importante informarse muy bien sobre esto antes de ir.

La moneda es otra cosa importante a tener en cuenta, más que nada para saber si debemos hacer el cambio en nuestro país de origen o resulta mejor hacerlo en el destino. Para ello recomiendo consultarlo en Ria, una casa de cambio segura y sin comisiones. En España tienen oficina en solo cinco ciudades, pero también se puede hacer online con la misma fiabilidad y te lo envían a casa. Además, recomiendo llevar una aplicación instalada en el móvil que se llama XE Currency, es un conversor de moneda para saber en todo momento cuánto estamos pagando.

Y por último, creo que conocer el sistema sanitario del país al que viajamos es algo muy necesario para ser conscientes de lo que nos podría ocurrir en el destino en caso de enfermedad o accidente. Si es un viaje a Europa solicito la Tarjeta Sanitaria Europea y también suelo consultar la página de la Asociación Española de Vacunología. Así averiguo si debo vacunarme de algo antes de viajar. Si es así pido cita en el Centro de Vacunación Internacional de mi ciudad. En la web del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social están todos los centros. Hay que tenerlo muy presente, porque en ocasiones hay que vacunarse hasta dos meses antes y sobre todo si se viaja a países con riesgo de transmisión de la fiebre amarilla.

   8. Seguro de viaje

Para una mayor seguridad en el destino, especialmente si es internacional, suelo optar por un seguro de viaje. Hay diferentes compañías y tipos de seguro, desde los más básicos hasta los más completos, con todo tipo de asistencias médicas y coberturas. Las opciones van desde para viajes cortos, largos, para mochileros, viajes en familia o por estudios, por lo que siempre hay algún seguro que se adaptará a tus necesidades.

La verdad es que merece la pena, solo por lo que ganas en tranquilidad. Piensa que en cualquier momento puedes torcerte un pie, que atrasen un vuelo o te pierdan la maleta (sin ánimo de ser gafe). Son cosas que pasan fuera de nuestro control y el seguro te las cubre.

Yo desde que descubrí a IATI, siempre que viajo al extranjero contrato el seguro de viaje con ellos. Normalmente suelo elegir entre el básico y el estándar, por ser viajes vacacionales cortos de máximo 30 días. Es de los mejores seguros que he encontrado en cuanto a relación calidad-precio. Para que os hagáis una idea, un seguro de viaje de 4 días con cobertura en Europa puede rondar entre los 8 y 16 euros. Creo que merece mucho la pena.

   9. Equipaje

El viaje está cada vez más cerca y va siendo la hora de pensar en el equipaje. Lo primero que tengo en cuenta para saber si llevar maleta pequeña de cabina, maleta grande para facturar o mochila, es el destino y los días que voy a estar en él. No es lo mismo viajar a Tailandia durante quince días que viajar a Menorca durante cinco.

Normalmente, suelo optar por la maleta de mano y antes de viajar siempre consulto las medidas y pesos permitidos por la compañía con la que vuelo para no tener sorpresas. Aunque la mayoría de las aerolíneas permiten unas medidas de 55x40x25 y un peso máximo de 10 kg, lo más prudente es confirmarlo porque hay algunas más restrictivas que otras. Para ello, yo consulto la web de ViajeroStore porque tienen un listado actualizado de las medidas de equipaje de mano para las maletas de cabina en las principales aerolíneas.

Una vez tengo claro el tipo de maleta que voy a llevar empiezo a elegir la ropa adecuada según la cultura del lugar al que viajo (por ejemplo un país musulmán) y la temperatura que vaya a hacer esos días, para no pasar ni frío ni calor. Hay aplicaciones que facilitan esta tarea y que te ayudan a organizar por categorías, calcular el peso aproximado de tu equipaje, hacer un listado para no dejarte nada e incluso añadir recordatorios, fechas y notas importantes. Yo he probado PackPoint y es bastante útil.

 

   10. Recomendaciones

Y por último, pero no menos importante os doy 4 recomendaciones más:

  • Llevar una copia de la documentación por si la perdéis u os la roban (llevarla de manera física o en el correo electrónico con la posibilidad de acceder os será muy útil para agilizar los trámites ).
  • Tener a mano los números de teléfono de emergencia, de la embajada o para cancelar tarjetas de crédito o móvil ante cualquier imprevisto.
  • Hacer una copia del planning para vuestra familia con todos los sitios que vais a visitar. Muy importante incluir los alojamientos con su dirección y número de teléfono para que os puedan localizar fácilmente.
  • Si sois unos apasionados de la fotografía y os gusta captar con vuestra cámara todo lo que veis os recomiendo subir las fotos a la nube después de cada jornada con el Wi-Fi del hotel. Yo uso OneDrive. De esta manera, vuestros recuerdos en imagen estarán a salvo.

Y hasta aquí todos mis trucos y consejos para organizar un viaje. Espero que os sean de ayuda y si a vosotros os funciona algo que haya pasado por alto no dudéis en dejarlo en los comentarios para que aprendamos todos juntos. ¡Buen viaje!