La siguiente invitada de “Gamer tenía que ser” tiene una trayectoria increíble y muy variada en el sector de los videojuegos e esports. Y es que posee todas las cualidades para ser una gran comunicadora. Es profesional, rigurosa y divertida. Detrás de su aspecto dulce hay una gran guerrera que ha demostrado (y sigue demostrando) que no hay cosa que se le resista. Ella es: Jen Herranz, redactora y presentadora especializada en videojuegos y tecnología.

Esta joven de 29 años, natural de Madrid, lleva más de 7 años trabajando de manera profesional en la industria y pese a que su camino no ha sido fácil, lidiando con estigmas y prejuicios, siempre ha tenido claro que los videojuegos eran su gran pasión y que quería aplicar todos sus conocimientos a ello. Estudió fotografía, realización y edición de vídeo para cine y televisión, diseño multimedia, marketing online y social media management, diseño gráfico y muchas cosas más.

Todo esto le ha llevado a ocupar diversos puestos en el sector. Sus primeros pasos fueron como cámara, editora de vídeo, redactora y programadora web.

La primera experiencia profesional que tuve en el sector fue ir a E3 (Electronic Entertainment Expo). Algo que me parece irónico, porque es la convención de videojuegos más importante de la industria. Pero lo cierto es que tuve mucha suerte porque yo acababa de terminar mis estudios, una persona cercana a mí necesitaba un cámara para acompañarle al evento y yo estaba ahí.

En 2014 fui a la primera edición de Gamergy y ese mismo año también estuve en DreamHack, en ambos eventos trabajando como cámara y editora de vídeo. Después de eso empecé a trabajar como Frontend Developer. Mientras, me monté mi blog y escribía sobre videojuegos, series, tecnología, gadgets, etc. Del trabajo en programación web me cansé y lo dejé, porque había un entorno un poco hostil siendo mujer.

Y llegó un momento de inflexión, en el que Jen pasó de estar detrás de las cámaras a dar el paso y convertirse en una de las caras más visibles del sector.

Encontré trabajo en otra empresa especializada en el mundo del Gaming donde empecé gestionando eventos y una zona de juegos que tenían en la Flagship de Telefónica en Madrid. Pero realmente solo estuve un mes en ese puesto porque luego ya pasé a ser Directora de Comunicación y de Marketing del proyecto. Me encargaba de YouTube, de los contenidos de su página web y de gestionar su comunidad en RRSS.

En ese momento fue cuando empecé a estar delante de la cámara, haciendo contenido en vídeo para su canal de YouTube. Entonces me vieron desde Meristation y me ofrecieron un espacio co-presentando un programa semanal por las tardes. En 2016 estaba en la portada de una revista que yo leía tres años antes mientras reponía los juegos en la FNAC. No me lo podía creer, eso me estaba haciendo muy feliz y era por donde yo quería seguir.

Pese a que Jen ya tenía el pie dentro en la industria, el trabajo de colaboradora no le llegaba para ahorrar e independizarse. Necesitaba un trabajo sólido, donde comprometerse durante toda la semana y fue justo cuando reconoce que se encontró con la difícil decisión de elegir entre tres ofertas de trabajo que le llegaron al mismo tiempo.

En Movistar Riders me ofrecieron quedarme como presentadora y reportera de sus formatos, pero justo Vodafone me contactó porque querían empezar un proyecto de esports y también necesitaban una presentadora, una redactora e involucraba quizás radio. En mi casa siempre se ha escuchado mucho la radio y a mí siempre me ha encantado la radio, así que seguí en Meristation y entré en el proyecto de esports en Vodafone. Ahí estuve presentando el Speedrun, el AMA (Ask Me Anything) y cada dos semanas tenía mi propio espacio de videojuegos en el programa de radio Yu.

Fue una de las épocas más felices en lo profesional, tuve unos compañeros maravillosos, pero en ese proyecto me acabé quemando mucho y lo dejé. Realmente a mí lo que me gustan son los videojuegos y hacer contenido en torno a videojuegos, tecnología, series… Y yo estaba ahí dando noticias sobre jugadores que ganaban, entrenadores de equipos y creadores de contenido. Todo hombres. Sentí que no encajaba con mi esencia, con lo que yo quería hacer. Soy feminista y aunque sea de forma pequeña quería hacer activismo en videojuegos desde lo que mi altavoz y plataforma me permitieran.

En la industria de los videojuegos hay más hombres que mujeres y aunque las cosas están cambiando y cada vez hay una mayor representación femenina, lo cierto es que sigue siendo un entorno adverso para nosotras. Hay muchas chicas que les gustan los videojuegos y que no lo reconocen abiertamente o que no se atreven a dar el paso en este sector porque de entrada es muy de hombres y les echa para atrás.

Por suerte, en lo profesional en España somos muchas las que nos ayudamos y apoyamos. Y gracias a comunicadoras tan inspiradoras como Jen y su trabajo en este aspecto con U-GALS o entrevistas en texto a mujeres de la industria para Red Bull, está consiguiendo su propósito: que muchas más chicas se animen a participar de la manera que quieran, como creadoras de contenido, desarrolladoras o jugadoras.

Además de todo esto, presentó la Gala Golfa de Fun and Serious con Karen Hernández en 2017. En 2018 se fue dos meses a Stugan para documentar en vídeo y RRSS varios proyectos indies de desarrollo. En 2019 fue la reportera de la MGW (Madrid Games Week), hizo contenido de videojuegos en forma de vídeo para Orange y estuvo colaborando con PlayZ hablando de gamificación y de ciber acoso en redes. Y este año estuvo Edu Day de Microsoft, en Code Motion dando una charla sobre salud mental y creadores de contenido, entre otras muchas cosas más.

En la actualidad estoy más asentada y estable, trabajo como ejecutiva de cuentas y relaciones públicas en Ziran, y soy imagen de marca de Samsung y he sido embajadora de ASUS. Todo esto lo compagino con el desarrollo de efectos de realidad aumentada para empresas del sector de videojuegos y de tecnología junto a mi compañero Juanjo (hemos hecho filtros para Bethesda, Samsung, FoxTV y Findus) y con mi faceta como presentadora y reportera en proyectos audiovisuales y eventos, como, por ejemplo, Radio Marca donde estoy de guionista, redactora y de colaboradora con Frank Blanco, con Kiko Béjar.

Y desde el confinamiento me he puesto en serio con Twitch. Llevo un montón de años haciendo contenidos para otros, YouTube es como un porfolio de las cosas que he hecho y que sigo haciendo como presentadora, como redactora o como reportera. Así que pensé que ya era momento de comprometerme con mi propio contenido, de manera constante y con un horario fijo. Y no puedo estar más contenta.

Como hemos podido comprobar, a lo largo de estos años hemos visto a Jen crear contenido (tanto de videojuegos como de tecnología) en una gran cantidad de medios, ha cubierto infinidad de eventos del sector, ha viajado al extranjero y ahora dedica parte de su tiempo a su canal de Twitch. Ser la cara visible y tener tanta exposición pública puede tener algunos inconvenientes y me parecía interesante saber cómo gestiona los comentarios negativos o la ansiedad que este trabajo puede provocar.

Lo puedo gestionar porque voy a terapia. Llevo trabajando con mi psicóloga 4 años y no creo que lo deje de hacer nunca. Ella me ha dado las herramientas y me ha ayudado a estar hoy en un punto de salud mental estable, y en el que ya sé cómo gestionar estas cosas. Creo que todo el mundo debería de ir a terapia, de verdad. Siempre hay algo que puedes desenredar y vas a estar mucho más en paz con tu vida.

Crear contenido quema, quema muchísimo porque parte de mi trabajo ahora depende de que a la gente le guste una foto que subo de una colaboración o que le guste el contenido que hago en Twitch. Hemos llegado un punto en que se interesan por ti para cogerte en un puesto de colaboradora o de presentadora si eres relevante en RRSS, ya no solo se fijan en si lo haces bien, eres una buena comunicadora, encajas con los valores que ellos tienen o con el enfoque que le quieren dar al producto, sino en los números que tienes para atraer a esa audiencia. Y eso es una carga mental muy grande.

Y por supuesto, estoy abierta a que me juzguen, estoy expuesta a que me suelten mierda y como mujer en esta industria mucho más. Hay determinados comentarios que no puedo leer y yo quiero leerlos para recibir feedback de cosas que puedo mejorar, pero a veces es imposible. Esto acaba afectando y yo lo puedo llevar porque voy a terapia y me esfuerzo activamente en cuidar mi salud mental. También al rodearme de gente maravillosa como tú ahora mismo, otras profesionales y amigas que nos apoyamos mucho y nos ayudamos a ver las cosas con otra perspectiva, sino pierdes un poco la cabeza.

Hablando de lo que buscan las marcas, en Jen han confiado muchas empresas como ASUS o Samsung, entre otras, para hacer colaboraciones o ser su embajadora, así que nos puede contar algunas claves para conseguir un patrocinio y alguno de sus secretos para que hayan querido contar con ella durante tanto tiempo.

En esta industria (bueno y en todas) hay que tener contactos y quien diga que no miente. Hacer networking es vital porque al final cuando se busca a alguien para un trabajo siempre preguntas a amigos, conocidos o piensas en quien tienes cerca que te guste y que te encaje. Al final, el cerebro siempre va a acudir a alguien con el que tengas relación y que confíes en como hace las cosas. ¿Y cómo se hacen los contactos al principio? Yendo a eventos, metiéndote en comunidades, estando activa en los chats, interactuando en RRSS, etc.

A mí Samsung me contactó porque estaban buscando a una persona que diera una charla conectando su teléfono Note 8 con videojuegos. Por aquel entonces yo estaba en Esports Vodafone y tenía relación directa con la productora que se encargaba de los contenidos de Samsung en RRSS, así que acepté la propuesta. ¿Qué hice yo? Me trabajé esa charla como si me fuera la vida en ello porque, aunque un cliente te diga que solo te quiere para una cosa, si tú lo haces bien, es tu forma de poner un pie ahí y que eso se convierta en algo más. Ensayé mucho, descansé bien, fui tranquila, el cliente vio esa charla y le gustó. Y a partir de ahí me siguieron llamando para otras acciones.

Claro, lo difícil es conseguir esa primera oportunidad, así que yo creo que alguien que esté buscando un patrocinio debe de tener un porfolio donde enseñe su manera de hacer las cosas, ir a buscar marcas que encajen con sus valores o que ya usas, eso siempre es muy importante. En mi caso con Samsung fue así.

Y en un primer contacto, sé super profesional, cuida el mensaje, la gramática, el lenguaje y sé muy correcto. No mandes un mensaje con faltas de ortografía o como si le estuvieras escribiendo a un amigo, sino la persona encargada de partnerships te va a rechazar en cuanto le llegue el correo. Ya tendrás tiempo de relajarte y ser más informal, pero yo de primeras, si consigues el contacto de esa marca y tienes una oportunidad cúrrate un dossier o un porfolio, aunque sea con tus mejores clips de Twitch o con el contenido que tú hagas.

El sector de los videojuegos y los deportes electrónicos está en auge, pese a la pandemia mundial que nos ha dejado sin todos los eventos presenciales, ha podido seguir con su actividad de manera online con relativa normalidad. Así que teniendo esto en cuenta y con la visión tan global de la industria que tiene Jen tras más de 7 años trabajando en ella, le he hecho dos preguntas clave. La primera: ¿Cómo ve el sector?

La industria de los deportes electrónicos en España, creo que dentro de Europa somos una de las más importantes. Somos quien más ruido hace y dejamos huella en quien pasa por aquí. Ahí está la muestra de los cuartos y las semifinales de los Worlds celebradas aquí en Madrid.

En panorama esports creo que estamos muy fuertes, estamos creciendo un montón (y vamos a seguir creciendo) y somos un ecosistema super saludable. Esto va a más en general, en el mundo. Es un sector que va a seguir creciendo, creciendo y creciendo, que genera mucho dinero y más que va a generar.

¿Cosas que faltan? Eso ya es abrir un melón, falta más apoyo a las jugadoras. Vamos poco a poco, pero hay que cambiar mucho la mentalidad de la gente, sobre todo de la comunidad y de quien consume. Y eso se hace desde arriba, de quien tiene el poder y el altavoz más grande. Hay muchas cosas que se tienen que regular todavía, por ejemplo, el tema de los jugadores profesionales está yendo muy bien, pero creo que todavía hay periodistas y colaboradores muy mal pagados. Por mi parte, yo estoy muy contenta y muy bien, todo está como tiene que estar, pero creo que hay mucho dinero y hay que repartirlo. Y también hay que valorar quien está currando.

Y la segunda y más importante: ¿Se puede vivir de ello?

Se puede vivir de ello, sí. Yo lo hago y a la vista está que muchas personas lo hacemos, que estamos viviendo de los videojuegos y de los esports. Ya sea desde las propias desarrolladoras y distribuidoras, creando contenido en torno a ellas, o desde la parte de comunicación y periodismo.

Es difícil, yo he tardado 7 años en llegar a un punto en el que creo que me puedo mantener de ello y además puedo ahorrar. Hay que dedicarle, en mi caso la vida entera, sí. Mucho tiempo, mucho esfuerzo. Pero volviendo de nuevo a la salud mental, los sábados por la tarde y los domingos son para mí. Y antes, aunque ahora ya no tanto, un día entre semana, los miércoles también eran para mí. Yo creo que si tu vida profesional y tu ocio es esta industria debes tener tiempo, amistades y relaciones en otras cosas, fuera de ella.

Y para acabar, con una trayectoria tan extensa como variada, me pregunto con qué nos sorprenderá Jen en el futuro. Porque es una profesional camaleónica que ha demostrado a lo largo de todos estos años en la industria, que es capaz de hacer cualquier cosa y hacerla muy bien. Dónde la veremos y qué planes tiene.

Lo primero que quiero hacer, con todo el curro que me estoy pegando estos dos últimos años y todo lo que viene esta temporada es ahorrar para comprarme una casita en el campo, a 40 minutos del centro de Madrid y hacerme la vida Stardew Valley total. Y mezclar un poco, porque me gustan los contrastes, la vida en el campo, un poco más ecológica y alejada, con mi habitación super tecnológica y seguir metida en esto a tope.

Y volviendo un poco a lo de Stugan y a lo que allí viví, a nivel profesional me haría muchísima ilusión trabajar en el desarrollo de un juego, de algún título o estudio. No quiero dejar de hacer contenido audiovisual, eso lo sé, no sé dónde estaré en Twitch en un año porque ahora tengo unos números muy humildes, la verdad, pero estoy muy contenta.

También quiero seguir haciendo comunicación porque me gusta tener ese altavoz y trasladar a otros lo que me apasiona. Pero yo sobre todo quiero ser feliz. Si en 10 años tengo un trabajito que me da para pagar mi hipoteca, para ahorrar y para hacer unos viajecitos, y luego estoy con mis streams y de vez en cuando haciendo alguna acción, ya está. Lo que sí que quiero es con mi trabajo, darle una vuelta a la utilidad y hacer sentir bien a otros, ayudar a las personas dentro de lo que es mi campo de expertise.

El próximo mes tendremos una nueva entrega con otra profesional del sector, para destacar y reconocer el trabajo de las mujeres en los videojuegos e esports. ¿A quién te gustaría ver? Puedes dejar tus sugerencias en los comentarios.